Corre tumultuoso en su camino hacia el mar,
besando la ribera de todo el litoral,
entre remolinos,
¡Mi Río Uruguay!
Navegando siempre va el verde camalotal,
lavando sus largas ramas está el
saucedal
en tus bravas aguas,
que bajando van.
En el despertar, tus aguas reflejan
todos los colores, cual mágico
cristal.
Ríen las naranjas
en el salto, viéndote jugar
y se duerme en tus orillas
la nostalgia del ceibal.
Corre, salta, juega,
nunca dejes de bogar.
Bendice por siempre la tierra
del Charrúa,
¡Mi
Río Uruguay!
Encuentros de café ISBN 978-987-28908-6-5